Bicigrino: Dícese de la persona que realiza el Camino de Santiago en bicicleta.

En el año 2022 un 5,21% de los peregrinos decidieron embarcarse en la experiencia de recorrer el Camino de Santiago en bici. Y, aunque a priori este puede ser un dato “flojo”, la realidad es que suponen más de 22.000 peregrinos. 

De ahora en adelante, bicigrinos.

A partir de aquí, surgen muchas dudas a las que intentaremos dar respuesta a lo largo de este post.

¿Es mi bicicleta adecuada?

Pues esto dependerá de si tu bicicleta se adapta bien a terrenos de carretera y caminos de tierra, si la utilizas habitualmente y sabes que se adapta perfectamente a ti o si la bicicleta está en perfecto estado.

Vamos por partes. 

Si eres un buen aficionado a las salidas en bicicleta, estás acostumbrado a hacerte kilómetros pedaleando y está perfectamente adaptada a tus necesidades y es algo que tienes más que controlado, te recomendamos que la lleves a algún taller especializado a hacerle una puesta a punto y ¡adelante!

Si te gusta la bici pero no tienes una buena en casa, puedes alquilarla. En Cycling The Camino (https://www.cyclingthecamino.com/es/our-bikes) tienes una gran variedad de modelos entre los que podrás elegir. Es un servicio realmente cómodo, ya que ellos se encargan de llevártela a tu punto de partida y de recogerla cuando finalizas tu aventura.

Además, por descontado, tienes asistencia 24h por si tuvieses cualquier problema con ella.

Ventajas y desventajas

Evidentemente, si no estás acostumbrado a hacer grandes recorridos en bici, debes entrenar antes, al igual que lo tendrías que hacer si fueras un peregrino al uso que va a realizarlo caminando.

En cualquier caso, hacer este recorrido pedaleando tiene unas cuantas ventajas. Te las enumeramos:

• En bicicleta, es posible cubrir distancias mayores en menor tiempo, lo que permite realizar el recorrido en menos días.
• En general se requiere de menos esfuerzo físico para recorrer la misma distancia que a pie, lo que hace que sea más llevadero para personas con menor capacidad física.
• Al contar con una bicicleta, se tiene mayor autonomía y se puede llegar a lugares que no están accesibles caminando.
• Mayor comodidad: la bicicleta permite llevar una mochila más pequeña y aligera el peso en la espalda.

Pero también podemos hablar de otros puntos no tan positivos: 

• Menor interacción con otros peregrinos: al ir más rápido, se puede tener menos tiempo para socializar y conocer a otros peregrinos.
• Menor disponibilidad de alojamiento: algunos albergues y hospederías pueden tener menor disponibilidad de alojamiento para bicicletas, lo que puede dificultar la planificación del recorrido.

¿Cuáles son los requisitos para obtener la Compostela en bici?

Para obtener la Compostela en bicicleta se requiere haber completado al menos los últimos 200 kilómetros del Camino de Santiago en bicicleta, acreditar el recorrido mediante la Credencial del Peregrino debidamente sellada en los alojamientos o lugares públicos por los que se ha pasado durante el recorrido y llegar a la Catedral de Santiago de Compostela para presentar la Credencial del Peregrino sellada. Es necesario haber realizado el Camino de Santiago con una motivación espiritual o religiosa. Es importante destacar que la Credencial del Peregrino debe haber sido expedida por una institución reconocida por la Iglesia Católica, y que el sellado de la misma debe haberse realizado en los alojamientos o lugares públicos por los que se ha pasado durante el recorrido. Además, es recomendable llevar siempre una copia de la Credencial por si se extravía o se pierde durante el recorrido. La Compostela es un certificado que se otorga a los peregrinos que han completado el Camino de Santiago, ya sea a pie, a caballo o en bicicleta, y es un reconocimiento a la motivación religiosa o espiritual del peregrino. Obtener la Compostela puede ser un recuerdo muy valioso para quienes han vivido esta experiencia única.

¿Y en bici eléctrica?

También la podrás obtener. Los requisitos son los mismos que hemos nombrado anteriormente.